El Ministerio de Acuacultura y Pesca (MAP) implementará el “Plan de Crucero Prospección Acústica y Pesca Comprobatoria” para establecer la composición, distribución y abundancia de las principales especies de pelágicos pequeños (pinchagua, botellita, macarela, entre otros) en aguas ecuatorianas.
El estudio, que es vital para la operación del sector pesquero artesanal e industrial nacional, se realizará a partir del 10 de marzo hasta el 28 de marzo de 2018 con la participación de cuatro embarcaciones industriales para la recolección de la información a lo largo de todo el perfil costero.
La pesquería de peces pelágicos sostiene a la mayor parte del sector pesquero que opera en los segmentos de harina y aceite de pescado, enlatados, enteros congelados y consumo directo, por lo que es prioritario conocer el estado actual de las poblaciones de estas especies, sus parámetros biológicos (peso, talla, sexo, estadio de madurez) así como las condiciones ambientales que enfrentan para aplicar las políticas necesarias para el manejo sustentable de estos recursos.
El personal del Instituto Nacional de Pesca (INP) coordinará las prospecciones y el análisis de los resultados que, entre otros beneficios, podrán servir de insumo para la fijación de los períodos de veda.
En la prospección del Golfo de Guayaquil se utilizarán dos barcos pesqueros, uno de los cuales llevará el ecosonda científico y otro llevará el equipo requerido para tomar los parámetros físicos del mar. Las otras embarcaciones cubrirán el área comprendida entre la puntilla de Santa Elena y Pedernales. El informe final se conocerá en mayo.
La ministra de Acuacultura y Pesca, Katuska Drouet durante rueda de prensa ofrecida en Guayaquil, dijo que “la información obtenida durante este crucero permitirá conocer la abundancia, distribución y disponibilidad de los recursos pelágicos pequeños en tiempo real, así como también el poder asociar las condiciones ambientales a los mismos y de esta forma poder emitir las recomendaciones necesarias para el manejo sustentable y sostenido de estos recursos”.
En 1990, el INP realizó el primer crucero de prospección Hidroacústica y Pesca comprobatoria para estimar la composición, distribución y abundancia de las principales especies de peces pelágicos pequeños. Durante ese año se estimó un total de 2.4 millones de toneladas a la costa ecuatoriana, siendo el Golfo de Guayaquil la zona de mayor biomasa, con 1.2 millones de toneladas.
En el 2016 se trabajó con seis embarcaciones pesqueras para monitorear el proceso reproductivo de las principales especies pelágicas pequeñas, realizando lances de pescas para obtener muestras de peces durante tres días. En dicho monitoreo se obtuvieron resultados satisfactorios que sirvieron de insumos para recomendar cambios en las fechas de veda para este recurso.