En el cantón Chichipe se cumplió la procesión en devoción a la Virgen del Cisne con un recorrido aproximado de 22 Km. del trayecto desde la parroquia Zumba al sector fronterizo de La Balsa, el mismo que se desarrolló con la activación de un Plan de Contingencia que permitió que los feligreses cuenten con la seguridad y atención médica necesaria.
Son cerca de 3000 peregrinos de diferentes lugares tanto del vecino país Perú como de los cantones Palanda y Chinchipe que se dieron cita para participar de esta caminata por motivos de promesas, plegarias y agradecimientos por los favores recibidos.
Seguridad y salud
Con respecto al trabajo interinstitucional Nixon Gaona, habitante de la parroquia San Andrés expresó “Me parece muy bien el trabajo desarrollado por las autoridades, porque han estado pendientes de cualquier accidente que pudiera suscitar”.
El párroco de Zumba, Alvaro Criollo mencionó “Los miembros de las entidades civiles y religiosas han estado al frente con la responsabilidad merecida, esta peregrinación es un acto de fe y vemos como la espiritualidad va fortaleciéndose”
En el trayecto se pudo observar la labor mancomunada de miembros de la Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Ministerio de Salud Pública, Gobierno Autónomo Descentralizado de Chinchipe, Cuerpo de Bomberos, entre otras entidades que brindaron la atención a la población participante, dejando como resultado un evento que contó con la seguridad y logística necesaria.
En lo referente a salud, dos puntos de atención en el sector de Pucapamba y La Balsa más una ambulancia estuvieron activados durante esta jornada religiosa que inició a las 6am y culminó a las 18h00 con la celebración de una misa a la llegada de la sagrada imagen “Los problemas presentados por los caminantes fueron deshidratación y dolor , lo cual fue atendido y solucionado de manera adecuada” informó María Piedra, directora Distrital (E).
Feligreses
Aura Patiño, habitante del cantón Chinchipe, compartió que fue su promesa realizar la caminata y que este año lo ha cumplido con éxito y con devoción en agradecimiento a los milagros vividos.
Por su parte el alcalde del cantón Chinchipe, Alberto Jaramillo, al finalizar las eucaristías realizó la entrega de un pergamino dirigido al pueblo chinchipense y a sus entidades en agradecimiento por los servicios brindados durante la romería, también como símbolo de amor a la Virgen entregó un ramillete de rosas.